VEGUETA, humero 3,1997-1998, (89-100) 89
Visitas de navío
en el Tribunal de
la Inquisición
de Canarias
en el siglo XVI
"Departamento de Ciencias Histciricas.
Universidad dc Las Palmas de Gran Canaria.
90 Alexis D. Brito Gotizález
A mediados del siglo XVI, ante la amenaza
protestante, la Corona española
establece el sistema de visitas de navíos
para impedir la entrada de libros e imágenes
contrarias a la religión católica y de
todo aquello, en definitiva, que pudiese ir
en su contra. En los primeros momentos, el
sistema no tenía ninguna reglamentación y
dependia casi por entero de la capacidad
del comisario; a partir de 1579, mediante el
acuerdo entre la Inquisición y el Consejo
Real, se establece una reglamentación precisa.
Por él, se concedía al Santo Oficio la prerroyativa
de ser la primpra institiición qiie
visitase los navíos que llegaban a puerto en
busca de objetos prohibidos'.
Debido a la informariiin C I I . ~ ~r untienp
las actas de visitas, éstas se constituyen en
un instrumento interesante para averiguar
dates !ef c~ntactos$, ehre tedG cernerciales,
con diversas zonas y países de
Europa; cobre los conflictos jurisdiccionales
entre !as diferentes autoridades para
realizar las visitas; y para conocer información
sobre los protestantes y su llegada y
estancia en cl archipiélago. Somos conscientes
de que las actas no constituyen la totalidad
de los navíos que llegaron a las islas ya
que su númcro cs notoriarnentc inferior al
que debió ser pero creemos que este trabajo
puede tener un doble interés: por un lado,
al scr el período inicial, apreciar las vicisitudes,
evolución y diferencias que existen con
períodos posteriores, cuando el sistema ya
se ha institucionalizado; por otro lado,
puede constituir una primera aproximación
al estudio de las relaciones comerciales del
archipiélago con Europa. Por últiino, queremos
completar el estudio de este tipo de
fuentes, al haber sido estudiados los siglos
XVIl y XVII12, en su etapa inicial de implantación.
1.- Las visitas de navío
La primera visita de la que tenemos constancia
se realiza en 1564 en Santa Cruz de
Tenerife3; desde esta fecha hasta 1599 se
realizan un total de 70 visitas, un número
poco siginificativo si tenemos en cuenta las
que se realizan en los siglos XVII y XVIII.
Durante estas tres décadas, no se puede
decir que exista una evolución en las visitas
si nos referimos a regularidad en las mismas;
precisamente es la irregularidad lo
que podría caracterizar este período inicial,
ya que frente a algunos arios con varias
visitas nos encontramos con períodos vacíos,
sin información. Durante las dos primeras
décadas, las visitas son esporádicas y.
aunque Acosta González afirma que, a partir
de 1587, se relanzan las visitas de navío4,
no será hasta 1593 cuando las visitas empiecen
a tener una cierta regularidad, tal y
como se puede apreciar en el Cuadro 1; además;
estas visitas tampocri tirnrri inna prrsistencia
si nos atenemos al lugar de realización
de las visitas, ya que en La Palma se
concentran en !I dtcada de 1.590, en Grrn
Canaria en las zonas iniciales de la década
de 1580 y centrales de la de 1590 v en
Tenerife en los momentos centrales de
ambas décadas.
Aún así, existen numerosos altibajos y
no existe una continuidad pcriódica, bien al
alza o a la baja. No obstante, si observamos
el Cuadro V, apreciamos cómo existe un
aumento continuado dc las visitas dc navío
desde 1593 hasta la primera década del
siglo XVII.
Jaimc Contrcras scñala quc los navíos
que van a ser especialmente visitados serán
los ingleses y holandeses aunque afectará a
todos aquellos que comercie< con el exteriur5.
En Canarias esta situación será algo
diferente (Ver Cuadro 11). Los navíos ingleses
apenas constituyen el 10% del total de
los visitados; y de los holandeses sólo existen
dos visitas, al igual que de navíos procedentes
de Fldrides. Fur el contrario, los
navíos procedentes de Francia representan
más de la mitad - en concreto el 54,3% - de
las visitas, destacando especialmente los
puertas bretones (Saint-Malo, Roscoff, St.
Brieuc)" los de Normandía (como El
Havre o Dieppe) aunque también proceden
de otras zonas como Marsella, Olona o
92 Alexis D. Brito González
Nantes. Asimismo, hay un importante
número de embarcaciones que tienen su
origcn cn divcrsos puertos de Alemania - el
21,4% - como Hamburgo, Bremen o Endem.
Testimoniales son las visitas procedentes
de! de E ..,, -, ,,,, I L V I L C bLA,uyU, C V l L l U Dcintzi- 6 7
Konisberg o Noruega, y de Portugal.
Es curioso constatar como apenas hay . . vi6ita6 de iiavbcrg proccden:es de Randes ü
Holanda, zonas consideradas dentro de la
esfera protestante al contrario que el caso
de Aieilidiiid de ~ - ~ yi-oiasv iiiiss i encori;ramos
varias visitas; algo similar ocurre con
los navíos procedentes de Inglaterra. Por
contra, resulta llamativo que más de la
mitad de las visitas sean a navíos procedentes
de Francia, un país que, si bien en este
período se encuentra inmerso en las llamadas
"guerras de religión" era considerado
como católico. Llamativo por cuanto se
supone que las visitas eran un instrumento
contra la influencia de los protestantes. Este
hecho se debe poner en relación con la
importancia que los diferentes mercados
tenían con el archipiélago, en especial
Francia, Inglaterra y Alemania7; mientras,
los holandeses, debido a su conflicto con la
Corona española, tenían prohibido comerciar
con las posesiones españolas y es lógico
que esta situación redujese el numero de
xiiies F e !! egasen Y. !as is!isX.
En lo que se refiere al lugar de llegada,
existe una cierta igualdad entre las islas de
..,.-l,.,.*r.
LCaL.n6", ta! jr ccme sc a?xcri?i en e!
Cuadro 111. Existe un ligero predominio de
Gran Canaria con el 38,6% mientras La
Falina acapara ün tercio de! total y Tcncrifc
algo más de una cuarta parte - 32,9% para
la primera y 27,1% para la segunda - y sólo
hay una presencia testimonial en
Lanzarote. En el caso de Gran Canaria, los
navíos llegan exclusivamente al Puerto de
las Isletas mientras que en Trnerife las visitas
se reparten entre el puerto de Santa
Cruz, Garachico y Daute, con un ligero predominio
del primero.
Dentro de las islas reseñadas, podemos
encontrar algunos datos significativos referentes
al origen de los navíos. Así, a Gran
Canaria llegan principalmente navíos fran-
DESTINO DE LOS NAV~OS
Gran Canaria
39%
. . . . . . . ' . . . . . . . , . . . . . .
Lanzarote
1 %
La Palma
33%
Fuente: AMC. Elaboración piopia
94 Alcxis D. Brito Gonzdlcz
Malo a Canarias, un navío podía tardar
desde 15 días como el navío "La
Magdalena"" o llegar hasta los 40 días
como "La Maríau2'. Algo similar ocurre con
los navíos procedentes de IIamburgo que
podían tardar entre 17 y 60 días; desde
Endem se podía tardar entre 24 y 70 días; o
de Roscoff entre 11 y 20 días. No obstante,
en algunos casos el viaje podía ser extremadamente
largo como aquellos que procedían
del Báltico; dc Dantzig sc podían en
torno a dos meses y de Konisberg casi cuatro
Comparando esta media con la
que realizó l . González de Chavez para el
siglo XVIII, podemos apreciar que, en algunos
casos como los procedentes de
Hamburgo, la media de la duración ha disminuído;
en otros casos, como el de Saint-
Malo, ha aumentado.
Esta disparidad en la duración de Ins
viajes se debe a varios motivos: la rapidez
de la embarcación, tiempos favorables para
travpsi2, !-. rpaliz2ción dp esc&s tripiezos
en el mar con piratas y salteadores.
De los primeros no tenemos noticias pero,
es indudable, que, dependiendo de la temporada,
se podían contar con vientos favorables
que ayudasen a los navíos y acortasen
la travesía.
Otro motivo cs la realización de escalas;
la mayoría de ellas suelen ser breves, unos
Ye-V-L-V"J UAL:-"U i 3 , T.- -..- "- ..L:l:--- -..:--:--1 J C L YUZ JC U C I I I L i U I I r Y I I A I L I y U I -
mente, para aprovisionarse de agua y alimentos
para la travesía. En algún caso, no
obstante, esta escala se puede prolongar
durante varias semanas2? No es extraño
que algunas embarcaciones realizasen escaid
el1 Mddeild U , ~ I I C ~ eUl1~ dUlg,~ iidid d del
archipiélago canario antes de llegar al destino
finaP4. No obstante, si el puerto de origen
se hallaba bastante lejos se realizaban
escalas en algún país intermedio como
Inglaterra, caso de la nao "San Pedro" que,
procedente de Middleburgo, estuvo cinco
días en el puerto ingles de Balmu (sic) antes
de seguir viaje hacia Sta Cruz de Tenerife?'.
Ademds de los motivos ya mei-icionados,
no hay que olvidar los peligros que se
corrían en la mar: naufragios, temporales,
etcZ6p ero también el riesgo de la piratería,
como le ocurrió al navío "San Francisco"
que procedía de Marsella. En palabras de
su capitán, estando cerca de Gran Canaria
" ... le corrieron tres navios de yngleses y
al cabo de tres dias le tomaron a vista de
cabo blanco y le traxeron consigo dos
meses o poco mas y al cabo deste tiempo
lo dexaron aviendole llevado su navio y
mercaderias que el traia y le dieron este
quc agora trae ..."."
2.- Conflictos jurisdiccionales
Ya hemos mencionado que. en los primeros
momentos, la realización de las visitas
dependía del buen hacer del comisario
o encargado de ejecutarla y que no
sería hasta 1579 cuando, después de un
acuerdo entre el Santo Oficio y el Consejo
Real, se crea iina reglamentación precisa
para las visitas y se concede al Tribunal
de la Inquisición la prerrogativa de ser la
primera institlnciSn en visitar los navíos.
A pesar de este acuerdo, no todos lo
aceptaron y muy pronto surgieron los
conflictos entre las diferentes autoridades
existentes en el archipiélago, siendo la
más común entre el tribunal del Santo
Oficio y los gobernadores o capitanes
generales y sus representantes en los
puertos. Así, en una fecha tan temprana
1 KV1 ,.- ---J..-- ..- n-..Ll:Abn ,.-L.-
'"L," L.,, 1, ,' y'"""" "" '"U""'" """
el gobernador Diego de Melgarejo y el
fiscal del Santo Oficio sobrc la visita a un
barco bretón que había llegado al puerto
de las Isletas y su pretensión de hacerlo
primero2" Algo similar ocurre en 1594
ruaiidü el gübei-imddüi- de Tenede yieieiidía
visitar los navíos antes que el Santo
Oficio2'.
Perv ya antes, en 1576, el rey vrdena al
gobernador Diego de Melgarejo que, cuando
llegue un navío al puerto, avise a los
inquisidores para que realicen la visita con
él y que sólo si éstos se demorasen pudiese
realizar primero la visita aunque sólo en
materia de armas y coiitrabando y nunca en
cuestiones de f@". Sin embargo, poco desVisitas
de navío en el Tribunal de la Inquisición de Canarias en el siglo XVI 95
pués, en 1577 el inquisidor Ortiz de Funes
msnda:
" ... se notifique a los almojarifes desta
ciudad que no abran ni consientan abrir
cofre ni fardo de mercadería donde quiera
que vinieren asi despaña portugal y de
otra qualquiera parte de francia flandes o
ingalaterra y de qualquiera parte de yta-
Ild sin que avisen primero a este santo
officio para que de aqui vaya persona
que los visite por el lo qual guarden y
cümp!m so pera de e:xoinüniun u de
dozientos ducados ...".3'
Fl 2-L- 1 - ---
~1 ~ILULIVU yur uaua LU~>LLI n r s t u s cuiiflictos
y tensiones no era, desde luego,
nada altruísta. Ser el primero en visitar los
iiavíus Udbd Id upu~iu~iiUddde exigir uiid
serie de remuneraciones por la visita e,
incluso, de reclamar ciertos servicios como
ia comida por venir el comisario o visitador
de lugares lejanos al puerto de visita.
Este tipo de rcmuneración o pago no estaba
recogida en ninguna normativa y dió
lugar a quejas por parte de los comerciantes
y maestres y capitanes; por este motivo,
la Suprema prohibio en 1606 la percepción
de derecho^^^. No obstante, estos derechos
se siguieron cobrando durante todo el siglo
XVII y aún en el siglo XVlll como lo
demuestran las repetidas quejas y escritos
elevados a la Suprema por mercaderes,
sobre todo extranjeros, como en 1636 cuando
varios mercaderes ingleses residentes
en Tenerife reclaman al Consejo de la
Inquisición por la forma abusiva de las
visitas de fP.
Cabría pensar que estos conflictos,
muchos de ellos de tipo jurisdiccional, fueron
más intensos y casi exclusivos del siglo
XVI por ser en los primeros momentos
donde la delimitación de competencias
fucse más difusa. Sin embargo, esto no es
así; estas tensiones continuaron produciéndose
en el siglo XVII y el siglo XVIII, como
ha estudiado J. Gonzáles de Chavez". De
hecho, no acabarían Iiasta que las visitas
dejasen de realizarse a fines del siglo
XVIII, lo que puede dar una idea de la
importancia que podían tener estas visitas
n a- r. .a- l.a- s a.-i- i t.n. .r .i .r- l a r-l o c., .- . A i c l o .ñ. a. -c.. TJP 1n1101
7---
momento.
3.- L2c ~&i f = ~2-,2 ~e f i f r -e ! nrnhc+an+ic- r------------
mo
Como señalamos al inicio de este artículo,
larv i&as Inl?L~r"i""ir'7n6ir"Gi.n 'r"iUr\m'" r\ ."."~y'".'~","i'" ' .t~
ante el brote protestante de mediados del
siglo XVI para impedir la entrada de obje-
4-" /l:L..-- : - A ,.L-i ",.-'."-..:-- r v a \ ~ ~ v i viau,i r iOr i i ra, c r ~ ,~ v i i r i a i i u aa !a fé
católica. Sin embargo, las visitas no se constituyen
sólo como un incdio de controlar la
ll ll-q- -aJ -u a uJc- - l - Z - L - - . L -..-L :L-- UUJCLUU, L a u w l r l l a y a l r c c l t cuiiiw
un instrumento de control y actuación
sobre los herejes.
T T
UIM I I L ~ I Id~eI c~u ~iucerl-a irriyuria~icid
de las visitas como arma contra el protestantismo
radica en la estructura formal, es
decir, en ei cucsrionario que se hacía a
diferentes tcstigos que venían en la
embarcación llegada al puerto. Fruto de
esta instrumentalización de las visitas es
que la mayor parte de las preguntas que
se realizan en este período, a diferencia
de lo que ocurrirá con posterioridad, se
centran en cuestiones religiosas. Un cuestionario
tipo a un testigo sería como
sigue:
l.-Cómo se llama, de dónde es, qué oficio
tiene.
2.-De dónde partió, cuánto hace, qué
puertos ha tomado y para donde va.
3.-Cuantas personas vienen, cómo se llaman,
de dónde son naturales y qué oficio
tiencn.
4.-Si de donde partió es tierra de cristianos
y si en ella publicamente sc dice misa y
oficios divinos.
5.-Si sabe o ha oido que alguien haya
dicho o hecho algo contra la fe o lo que
enseña la Iglesia.
6.-Si sabe que todos los que vienen en
dicha nao son cristianos católicos y como
tales les I-ia visto.
7.-Si sabe o ha oido que alguno haya
dicho algo contra Dios y la Virgen o el Papa
y la Iglesia en general.
8.-Si sabe de alguien que haya comido
carnp pn viernes n vigilia
9.-Si traen libros n imágenes.
el cual se realizó en Garachico a diferentes
testiggs de !2 " ~ ! i ~ 2 ~ p tnhrn"r oAonto r.
de Escocia". Este sería el cuestionario base
que se realizaba habitualmente, s a l ~ olig e- . . rsr variac?unes CGEG 13 FirriSil de &S nYrAn--
guntas en una o el orden alterado de alguna
pregunta. Como se puede apreciar, dos ter-
,:,, ,&, . . , , .A. ,, 1 - 0 ,,,".l ,,I ,,,,, :, LL"* L C L L'., yLLeLt.CL'L0 L L ' t L C L L L C . c , L C L % L & ' , ¿2
temas religiosos; con ello, se pretendía averiguar
con exhaustividad si los recién Ilegades
exir, reahirnk cristianos o se hacian
pasar como tales.
Para una mayor profundización, en
iiuiiieiusas urdsiuiies id11hi61t be ies pregunta
si rezan y qué rezan. Aquí las respuestas
son muy similares, con un predominio
del Padrenuestro y ei Ave ivíaría,
tanto por la mañana, mediodía y tarde. No
obstante, en algún caso se salcn de la
norma como cn el navío "La Esperanza"
que partió de Saint-Malo y donde se rezaba
maitines y vísperas, por la mañana, y la
Salve Regina, Ave Maristela (sic) y Oh
Gloriosa Domina y Magnifica, por las tard
e ~ ' ~ .
Junto al cuestionario, no hay que olvidar
que la carga era revisada dos veces:
una a bordo y otra en tierra, tras ser descargada.
Se abrían los fardos, se miraban
las pertenencias personales, etc con el
objeto no sólo de buscar objetos prohibidos
sino también de controlar el contrabando.
Llegados a este punto, cabe preguntarse
si las visitas realmente funcionaban
o, por el contrario, no servían para impedir
la llegada de objetos contra la religión
católica. No hay que olvidar que, a pesar
del cuestionario tan exhaustivo, los inquisidvres
sólo podían actuar contra la tripulación
y pasajeros por delitos cometidos
después de haber llegado a puerto y
no por los realizados en la travesía o en
su tierra, es decir, por ser protestantes.
Por otro lado, en ninguna visita se encontraron
imágenes religiosas y apenas se
hallarnn lihrnc, cnmn e! caw en nilo co 2-- '-
halló un libro intitulado fray Luis de
Granada, segunda parte del libro "Guia
do nro- r~s-r-inLr'n-c-"L~ ~'e; un libre nC)mhr2dCI
"Memorial d e la vida ~ r i s t i a n a " ' ~e,s
decir, preferentemente publicaciones de
+,,A&;,, T, ,A,&, ;\x&m&, a """""U "U""" ""
pesar del celo inquisitorial, seguía existiendo
el contrabando y numerosos pro-
Crlr\"Co^L-L,u-. iirra y Lv a i c v a li li-r-5-Lav- -a i i a !a3 ~ s !&CsO i i
pasaportes falsos, como se descubrió en
1593 en Las Palmas cuando trcs navíos
L - l - - - 3 --.L- -... 1.- ,-- -- .. - L . '
IIUILLIIUCDT> lurlu~i cillual~auuu y uus 111-
pulaciones detenidas por contrabando y
protestantismo3"".
P . 21 observariius ei Cuddro 'v., ayreciamos
que la mayor presión, en lo que se
refiere a las actas de visita, se producen en
ia transición cici sigio AY1 ai sigio mii,
concretamente cntrc 1593 y 1610, con el
mayor número de visitas4'. Los tratados de
la Corona española con diferentes países
europeos, entre ellos algunos de los considerados
como heréticos caso de Inglaterra
u Holanda, en los primeros anos del siglo
XVII van a calmar los ánimos inquisitoriales
contra el protestantismo. A partir de
entonces, las visitas se reducen y se mantienen
en unos niveles similares hasta el
último tercio de siglo; el incremento que
se produce a finales del siglo XVII se
deberá a otros motivos, completamente
diferentes a los que dieron lugar a las visitas.
Por entonces, las visitas se habían institucionalizado
y eran un mero formulismo
utilizado por comisarios para la
percepción de algún tipo de remuneración.
En favor de las actas de visita, hay que
decir que, si bien, su utilidad resultó bastante
discutible, la información que ofrecen
sobre otras cuestiones referentes al coinercio
y relaciones del archipiélago canario
con Europa es bastante importante y, e11
este sentido, se han convertido en una
valiosa fuente para el conocimiento de estas
cuestiones.
1570-79 1580-83 1590 99 1600-10 1611-;O 1621-30 131.40 1641 50 1651-60 1661 70 '673-80 1681-G0 1691-96
Anos
Apéndice
A.M.C. Inquisición CV-22
"en el lugar e puerto de garachicn que es
en esta ysla de thenerife en dos dias del
mes de enero de mil1 e quinientos y noventa
y sinco años ante el padre fray gaspar
armas cumissario del santo officio de la
ynquisicion destas islas en la de la palma
residente en esta dicha isla y por presencia
de mi juan marrcro prcsbitero notario
apostolico paresio siendo llamado u11 hombre
que parese aber benido en un naoio
que a este puerto llego oy dicho clia del
qual fue recivido juramento en forma de
derecho so cargo del qual pronietio de
decir verdad y se le hizieron las preguntas
siguientes
Preguntado como se llama de donde es
naural y que officio tiene
dixo que se llama estevan giraldo y ques
natural de samalo en bretaña y vezino y
ques mercader del navio nrmibrado la esperanqa
que esta surto en cl roque dcste pucrtu
de q~iierei s maestro pedro fiuv vezirio de
samalo
Preguntado de que tierra y puerto partio
quanto a que puertos a tomado y para
donde yva
dixo que partio de samalo ayer que se
coiito primero de enero hizo tres semanas y
que tomo la isla de la madera y que venian
para csta isla o la de la palma
Pregiintado quantas personas vienen en el
dicho navio de donde son naturales y wzinos
y que officios tienen
dixo que viencn trcse hombres y dos
muchachos y que rl niaestre se llama pedro
tuix vczino de samalo de donde es natural
jaque butier natural de erqui junto a samalo
oliver dcl villar de samalo marinero
cristoval thomas pasajero vezino de samalo
hamon xales vczino de samalo marinero
bernal criie7 de samalo marinero
metunez surjano de samalo
pedro bujer marinero de samalo
bernal pele marinero de sanlalo
juan pican carpintero de samalo
jorje jan iriuchacl-io rnercdder en conpaííia
destc testigo
juan droyete grumete de sanialo
julian danit grumete de samalo
98 Alexis D. Brito González
Preguntado la tierra y puerto de donde partio
si es de catholicos y si en ella se dize
publicamente misa sermon y los demas
officios divinos dixo que es tierra de catolicos
y en ella se dize missa publicamente y
los demas officios divinos y ay obispos y
canonigos todos muy catolicos
Pr~yiintados i ~ a h np a nydnd~sq iw algiinñ
persona aya dicho o hecho alguna cosa que
sea o paresca ser contra nuestra santa fee
cafhn!ica v ley evangelira n contra In q i . ~
enseña manda y predica la santa yglesia
catholica romana
dix^ n i t r i nn caho ~i 2 nrrdnrlnc niio cp le 1"- -'- --'- -,' ----- y--
pregunta ni tal a oydodes de personas en
samalo porque grazias a dios todos son
m y c athcdic~cc, ristiafi~s
Preguntado si sabe que alguno aya dicho
mal de dios santa maria o de algun santo o
-.s.,-,,,,.., ,, ,-1 . --..m rc.ru 8 c! cstodo cc!csinstico cn
comun
dixo que no sabe ni a oydodes nada de lo
que se le pregunta
Preguntado si sabe que alguna persona aya
comido carne en viernes o en otro dia
prohibido por la iglesia
dixo que no lo sabe ni lo a oydodes
Preguntado si los que vienen en el navio
son catolicos cristianvs y si resan y se
encomiendan a dios que resan y a que
nrñs
dixo que todos los que vienen en el dicho
navio son catholicos cristianos y como tales
este testign les a visto por !a mañana resan
las oras canonicas que son maytines y visperas
y las demas oras y a las tardes resan
sz!i,~e r@n.i y -~.zrist& TI ulnrinca
J
domina y magnifica
Preguntado que ymagines y libros traen en
S! Y he n ? i i i ~
dixo que los libros que vienen en el dicho
navio son oras en que resan y este testigo
frac U:: !ih-i: sc dicc mcmoria! dc !u bidu
cristiana y esta es la verdad por el juramento
que hizo declaro ser de hedad de cinquenta
años . .".
NOTAS
1 I'ara un mayor acercamiento al tema, veánse
Contreras, Jaimc: El Santo Oficio de la
Iriq~~isiciódne Gnlicia. 1560-1700. Madrid 1982
pp. 151-157; y Lea, Henry: Hislorin dr Iii
Inquisición espaliola. 3 Vols. Madrid 1983 Vol.
111 pp. 320-330. Asimismo, se pueden encontrar
datos intcrcsantcs a1 mismo referidos a
Canarias en Acosta González, Andrés:
Cstudio coniparatico de tribunales inquicitoriales.
Madrid 1991 pp-124-126.
2 TORRESSA NTANAEL, ISA:" Visitas de navíos
extranjeros en Canarias durante el siglo
XVII". V Coloquio de Historia Canario-
Arn~ricana (1982) Las Palmas de GC 1985,
Tomo 1V pp. 424-444; GONZÁLEZDE CHAVEZ
M~vÉrún~JzE,S ÚS": Las visitas de navio en el
Tribunal de la Inquisición de Canarias. Siglo
XVIII". VI1 Coloyuio de Historia Curiario-
Americuna (1986), Las Palmas de GC 1990,
Tomo 11 pp. 713-732.
3 (A)rchivo del (M)useo (C)anario Inquisición
Sin catalogar (l564/ Junio/17).
4 ACOSTGAO NZÁLEAZN, DRPSE:s tudio comparatizio
... op. cit. pp. 126.
5 CONTRERJAAI-M~E~: ,t l Santo Oficio de la
Inquisicióri ... op. cit. 151-252.
6 Esta tónica continuará durante los primeros
años dcl siglo XVII. TORRESS ANTANEAL,I SA:
"Visitas de navíos ..." op. cit. pp. 439-441.
7 Loso CABKEKMA,A ~UEELl :c omercio canario
europeo bajo Felipe 11. Funchal 1988 pp. 171 y
siguientes.
8 No obstante, la no aparición de holandeses
también tiene otros ;notivos. Era de todos
conocidos que los holandeses eran principalinente
protestantes y, por tanto, susceptibles
de sufrir un mayor control por el
Santo Oficio de ahí quc probablemente apar
e ~ r a ne n e1 arrhipiblago bajo otra nacionalidad,
es decir, realizando contrabando y
fraude. Esto es lo que se desprende del
estudio de Thomas, Werner: "Contrabandistas
flamencos en Canarias: 1593-1597". IX
Coloquio de Histouin Canario-Americana
(1990), Las Palmas 1993, Tomo 11 pp. 55-92,
Visitas de lid\ íu en el Tribunal de la Iiiquisicióri de Canarias en el siglo XVI 99
Y No hay que olvidar que en La Palma existía ..-- :-.--..s..-&- -,.l,...:- A- Ll~--..,...~ T. -1- U"" ""yV"""LC '"'""'U U' """'C"'"3 ,Y U"
manes asentados desde principios de siglo;
las relaciones de Gran Canaria con Francia
fueron importantes durante este período
como ha estudiado Lobo Cabrera, Manuel en
El comercio canario ewopeo ... op. cit. pp. 171-
173.
10 La excepción a esta norma la constituirá
Lanzarote donde se realizarhn 13 visitas
duran.te . un breve período del siglo XVII; y ..-.. ... ".LA ^- T .. r- 2 ..---L.. -1
Ull" \ . l J l L ' l C', La UVlllC," U U l " l l L C CI L l l l J l l l "
período. TORRESS ANT~NAEL, ISA: " Visitas de
navíos extranjeros ..." op. cit. pp. 432.
11 En concreto. son 29. casi la mitad. las que no
lo ofrecen. Es de resaltar que la mayor partc
son visitas realizadas en La Palma (20 de 23
no ofrecen este tipo de datos); en el ladn contrario
se encuentra Las Palmas en el que
todas las actas si ofrecen esta información.
12 Como las que trae el navío "El Angel" desde
Si "Drieuc d Las Painids. A.iví.C. iriquisici61i
C'1,VII-4 (159h/Jiilio/ 15).
13 El navío noruego "Verguer Bote" trae 50 lantre
(sic) de trigo y centeno a Las Palmas.
A.M.C. Inquisición CV-7 (1593/Noviembre/
24); o el navío "La corte de
Borgoña" que lleva hasta 2.000 fanegas de
trigo y centeno de Amberes a Garachico.
A.M.C. Inquisición Sin catalogar
(1583/Mayo).
14 A.M.C. Inquisición CV-7 (1593/Diciembre/
24). Los trae el navío "La María" desde
Saint-Malo.
15 Que lleva una nao inglesa a Sta C r u ~d e
Tenerife. A.M.C. Inquisición CLXXV-59
(1574/Febrero/l).
16 LOZA m AVFTO que transporta el navío "San
Antonio" a la Gomerd aunque arriba a Dautr.
A.M.C. Inquisición XLI-23 (1580/Julio/21).
17 Este productos aparccc en algunas ocasiones
como el que trae la nao "La Glaude" de
Dieppe a Las Palmas. A.M.C. Inquisición
CLIV-62 (1580/Noviembre/17).
18 Este producto aparece en varias ocasiunes
como las que trae la nao "La lebrera" a Las
Palmas desde El Havre. A.M.C. Inquisición
Sin catalogar (1583/Febrero/18).
19 A.M.C. Inquisición Sin catalogar (1594/Julio/
7). Los trae de Nanks a Las Palmas el
navío "La Buenaventura".
20 A.M.C. Inquisición CLV-31 (1581/Julio/21).
21 A.M.C. Inquisición CV-7 (1593/Diciembre/
24).
22 Como el navío "El Aguila Negra" que llega a
LU3 pU!r,as i;ruce~eí;~c de cstn ciU&d b&!:ica,
aunque declaran que estuvieron un tiempo,
sin especificar en Bergen (Noruega) a
donde llegaron por temporal. A.M.C.
Inquisición Sin catalogar (1597/Febrero/5).
23 Como el caso de un navío inglés que tardó 44
días desde Inglaterra a Sta Cruz de Tenerife;
aunque de ellos estuvo 21 días en una escala
en Madeirci. A.M.C. Inquisición LV-17
(1584/Diciembre/9).
" A A - ? -1 <- #fT ,.-LA,, J . . . L - 2.
L1 n J I , CI I L ( I Y L U VTI5UCI VVLT pIUCCUTIIIT UC
Bergen en Noruega hizo escala en Lanzarote
antes de llegar a Las Palmas. A.M.<'.
Inquisición CV-7 11593/Nnviemhre/24).
25 A.M.C. Inquisición CLXXV-74 (1584/0ctubre/
24).
26 Como el navío "San Antonio" que partió
de Avero hacia la Gomera pero que, debidu
a un temporal, arribó a Daute en
Tenerife. A.M.C. Inquisición XLI-23
íi5EO/juiio/iij.
27 Otro testigo ratifica lo mencionado y aclara
que en esos dos meses los llevaron a Guinea.
A.M.C. Inquisición XXXVIII-37 (1598/Octubre/
4).
28 A.M.C. Inquisición Sin catalogar (1571/0ctubre/
31).
29 Para ello alegaba que tenía orden del presidente
de la Real Audiencia de Canarias de
visitarlos primero, según carta del comisario
de Sta Cruz de Tencrifc. A.M.C. Inquisición
CLXVIII-42 (1594/Febrero/4).
30 A.M.C. Inquisición Sin catalogar (1576/
Agu"o/8).
31 A.M.C. Inquisición Sin catalogar (1577/Febrerol22).
12 Según carta acordada de 10 de Noviembre de
1606. Citado por Contreras, Jaime en El Surzto
Oficio de la Inquisiciót~ de Galicin ... op. cit. pp.
151.157.
33 A.M.C. Inquisición CLXTII-h6. Y todavía en
1675 el cónsul y residentes ingleses en
Tenerife elevan un escrito para que el Santo
Oficio no cubre los 40 rcalcs dc las visitas por
ir contra las paces entre Inglaterra y España.
A.M.C. Inquisición CLXXIV-70.
34 Los conflictos también se pueden resumir en
conflictos por la realización de las visitas y
por el cvhro de derechos por ellas. GONZÁL~L
DE CHAVEZJE, SÚS: "Las visilas de navío ...."
op. cit. pp. 713-732.
35 A.M.C. Inquisición XXI-12 (1594/Diciembre/
31).
36 Scgún testificación de Esteban Giraldo, mercader.
A.M C Inqiiisición CV-77 (1 595/Fnrro/
2).
37 Se encontró en la nao "San Miguel" que procedía
de Inglaterra. A.M.C. Inquisición XXXVIIl-
30 (1581/Agosto/2).
38 El libro lo lleva Esteban Giraldo, mercader,
que vi en^ en el navío "La esperanza".A.M.C.
Inquisicion C\'-22 (1595/Enero/Z).
39 La mayoría de los presos, 51, desfiló en el
auto de fe de 21 de Diciernbrc de 1597 y unas
20 causas se despacharon en los año5
siguientes a este auto. Para una mayor profundización
en este asunto, veáse Tliomas,
Werner: "Contrabandistas flamencos en
Canarias ..." art. cit. pp. 84.
40 También se produce un incremento en el
número de procesos por cuestiones de fé, de
protestantismo, cuestiones heréticas y asuntos
reidciuiiddus cuii rl Lrriia. ACOST.~
GONZALEZA, NDRÉS:E studio compamtiuo ... op.
cit. pp 140-142.