VCGUETA, Número -999 (267-282) 267

Un siglo de

temporales en la

prensa de

Gran Canaria

1. INTRODUCCI~N

U-., A* A:- 10 *AA,v:A-A AA A n o - v ~ ~ l l - - "U "A" A" "A" "' """"""L."'

estudios para obtener un mejor, y más amplio,

conocimiento de los diferentes riesgos

resulta cada vez más urgente, sobre todo

desde el punto de vista de la plailificacióil

territorial. Por ello, conocer los distintos

riesgos naturaies que proaucen acontecimientos

de carácter excepcional, y que ponen

en peligro al grupo humano que es incapaz

de dominarlo, es fundamental de cara

a la prevención de pérdidas humanas y

materiales.

En el estudio de las catástrofes naturales

que asolan periódicamente a la población

y a sus actividades, la prensa se nos

presenta como una fuente de gran significación

e importancia. Entre otras razones

porque cada vez que sucede un fenómeno

de carácter adverso la prensa lo registra, lo

comenta, 10 valora y analiza, convirtiéndose

en tina fuente, en cierta modo, insustituible.

Tal y como mencionan Torres et alii

(1986) esta fuente presenta la particulari-

.id do p r o ~ c u p ~ cpoor o! c x á c t o r oxcopcional

de aquellos fenómenos naturales

que producen algún tipo de conmoción sobre

la sociedad.

Aparte de su carácter de temporalidad,

que queda de manifiesto en el registro pe-

. . : A > : - - 3- 1-m -:L ..--:- --- -^L^^L..^K:--r 11-

IIUUILU UC la3 DIILIULIVILCJ LCILLLOLIVIILUa \1V

cual permite tener una continuidad temática),

también es importante señalar que

gracias a la prensa podemos determinar las

consecuencias que para la población tuvo

el fenómeno analizado, aquellas áreas que

se han visto afectaaas, y ia percepcih que

de cada situación crítica tenía la población.'

Por otro lado, y en el caso del estudio

de las sequías, a su carácter de "temporalidad"

hay que añadir el "globalizador"

apuntado por Pito M.F. í1985), porque es la

única fuente capaz de aportar el impacto

global generado. Asimismo, incluye informaciones

relativas a los más variados aspectos

concernientes al desarrollo de las sequías.

E! p""'"te J fer?r,u -Y.",,".'+ o A- .ar. --

estudio en fase de elaboración que tiene como

objetivo el análisis dc las situaciones

meteorológicas que han causado graves

daños en vidas y bienes en Gran Canaria.

Dentro de las metodologías propuestas para

tipo de es;u&os c:iiii,Cl niitUjj ,

(1994) considera la necesidad de revisar todos

aquellos episodios catastróficos en una

serie de aiius lo sulicieriieriierik larga para

otorgar validez climática al hecho episodio

diar-io . cs por esid ra~óri, pur id que iierrius

analizado las informaciones periodísticas

publicadas en Gran Canaria desde 1855 (fecha

de publicación del primer periódico en

Gran Canaria) hasta 1997, aunque hemos

acotado la extensión del presente artículo a

los anos dei siglo XX.

Los periódicos consultados son los siguientes:

Diario de Las Palmas, El 'Tribuno,

La lJatria, La Defensa, La Crónica, El Liberal,

El País, Falange, La Provincia, El Eco

de Canarias y Canarias 7.

Con el fin de sistematizar la recogida de

información, hemos confeccionado una ficha

en la que se detalla, entre otros, los siguientes

aspectos: periódicos consultados,

fechas de publicación, fecha del suceso y

calificativo empleado e11 la descripción del

fenómeno. A continuación se refiere la descripción

del ternporal en Las Palmas de

Gran Canaria: víctimas, inundaciones, dañus

en infraestructuras viarias, daiios en

infraestructuras agrarias, daños en infraestructura~

portuarias y otros daños. Posteriormente

se hace referencia a los daños

ocasionados en el interior de la Isla, diferenciándose

la zona Este, Sur y Oeste de

Gran Canaria de la zona centro y Norte de

la Isla, siguiendo con el esquema definido

para Las lJalmas de Gran Canaria. Finalmente

se mencionan las peliciones que realizan

las autoridades públicas en busca de

ayudas al Gobierno Central.

Por otro lado, hemos procedido a la recopilación

de información procedente de

Un siglo de temporales en la prensa de Gran Canaria 269

otro tipo de fuentes históricas tales como:

actas del Ayuntamiento de Las Palmas de

Gran Canaria y las actas del Cabildo lnsular

de Gran Canaria, con el objeto de contrastar

las informaciones periodísticas con

otro tipo de fuentes. Además es importante

analizar las valoraciones de daños y la

importancia que para la comunidad tiene

cada evento estudiado.

Hay que señalar, q. ue debido a la gran --..&:A-A A- :..l,,..-.,,., , ",,,, -ht0- L U I L I I U C L U U.. I I I I V I I . L L L L . V . . C UL i i C i i i u i i --.- 1

nido de la ciudad de Las Palmas de Gran

Canaria, hemos diferenciado ésta de otros

iugares y municipios de ia isia.

Finalmente hemos contrastado los valores

de precipitación caída en cada evento a

fin de determinar cuál es el umbral minimo

de precipitación a partir del cual comienzan

a producirse daños de cierta consideración,

espccialmente en la ciudad de

Las Palmas de Gran Canaria.

3. ANÁLISIS DE LAS SITUACIONES

METEOROLÓGICAS QUE HAN TENIDO

REPERCUSIÓN EN LA PRENSA

DE GRAN CANARIA: 1900-1997

Para abordar este análisis hemos dividido

en dos partes nuestro periodo de estudio

debido, entre otras razones, a la amplitud

del periodo en cuestión y a la gran

diferencia que tiene el tratamiento de la información

periodística en cada uno de

ellos.

3.1. Primer periodo: de 1900 a 1949

En esta primera mitad de siglo hemos

analizado 20 situaciones en las que los distintos

periódicos consultados resaltan los

daños ocasionados por situaciones meteorológicas

adversas. Entre los calificativos

empleados para definir estas situaciones

destacamos el de "ternpurul", "lliivins torrencinles"

y el de "viento hirrncanndo". Tal y

como se refleja en la fistra 1, noviembre y

enero son los meses en los que la prensa refleja

un mayor número de situaciones.

FlGURA 1: Frecuencia mensual de sucesos

aciagos en la prensa grancanaria (1900-1949)

1 111

3.1.1. El relato periodístico

En lo que al relato periodístico se refiere,

la ciudad y su entorno centran la información.

Las noticias que se reciben del interior

de la Isla son todavía escasas. No

obstante, la mayor parte de las noticias que

se reciben del interior provienen de los

propios habitantes de los pueblos afectados.

Estos habitantes se dirigen a las autoridades

insulares para rclatar los graves

daños que ha producido el temporal en cada

rincón de su pueblo, así como las grandes

ptrdidas que han sufrido sus vecinos.

a) La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria

Cuando un periodista relata lo acontecido

tras una situación meteorológica adversa

comienza siempre describiendo cómo

se vivió ésta en la ciudad de Las Palmas

de Gran Canaria. La noticia se

estructura, normalmente, siguiendo una Iínea

en la que primero se describe la hora

de inicio del temporal, cuándo éste adquiere

las mayores proporciones y el estado

dc la atmósfera que envuelve la situación.

Todo ello descrito como si se tratara

de un escenario teatral en el que se está reproduciendo

una obra dramática. Sirva como

ejemplo la descripción del siguiente

temporal:

"Pocas veces se hn presencindo aquí un tenzpornl

tan imponente como el de onochr. Drsdr

por la tarde se iznbía presenfndo cerrndo el horizonte,

y entre Ins nueve y diez de in noche el

resplandor del relámpngo y (4 mido del trurno,

indicaban que la tormenta avanzaba. A las 017-

ce menos diez minutos, descargó sobre la poblncion

irna verdadera troinba de ngirn, en términos

tales que las calles se convirtierotz eiz barrancos.

Con i p d f i ~ e r z eas tuvo cayendo knsta

las doce de la noche. El relan~pagueoe ra incesante,

y el ruido del trueno daba al espectáculo

urr carácter que injundío verdadero pnvor."

Tal y como vemos en este relato, la información

que se puede extraer de esta tormenta

hace referencia a la duración (tres

horas, entre las nueve y doce de la noche),

cuándo ésta adquiere las mayores proporciones

(cuando la intensidad de la lluvia

fue más alta: entre las once menos diez y

las doce), qué tipo de nubes podemos

aventurar que existían (relámpagos y truenos

indican que, probablemente, se tratase

de ctínzulos o cumtdoniinbos) y, finalmente,

las sensaciones experimentadas por la población.

Posteriormente, el periodista hace referencia

a los grandes destrozos quc produjo

el temporal en su ciudad, con especial

refcrencia a: víctimas del temporal, áreas

ini.indíidíis, cortes de carretera^ y vías públicas

en general, daños en propiedades

(especialmente iniindaciones en viviendas,

hundimientos de techos, etc.) y fincas (sobre

todo aquellas situadas en los márgenes

de los barrancos), derrumbamiento dc mura!!

ls J' m ~ r mde cnntención, rot1ur-i en ranales

de distribución de aguas, etc. La proliferación

de detalles a la hora de describir

los destrozos ocasionados es tal que nos

permite conocer con relativa exactitud el

alcance del siniestro (sirva como ejemplo la

,,i,,;x, ,;,ni A, 1,- prGpicturiGc ufec- iLLc,L,"L, .L".lL.LL,&L .AL ."U

tados). Esto pone de manifiesto, entre otras

cosas, que el espacio vivido por la población

en estos primeros 50 anos es reducido,

que "casi todos se conocían" y las noticias

"se comentaban a viva voz" entre los ciuciacianos.

A continuación, o junto con la descripción

de las zonas inundadas el periodista

va describiendo el estado general de las vias

de la ciudad. Una de las frases más recurridas

en esta primera mitad de siglo para

definir el estado general del viario es el

de "calles conaertldas en Dnrrancos". Esto no

es de extrañar pues funcionaban ccmo verdaderas

canalizaciones de las aguas que

discurrían desde los riscos y laderas hacia

las partes más bajas de la ciudad, dejando

los corrcspondicntes materialcs detríticos y

demás materiales provenientes de los

arrastres en las confluencias de otras vías

o, en el peor de los casos, se introducían

dentro de las casas ocasionando serios desperfectos.

De csta forma, inundaciones de

callec y cg.sas sl-wlen ir aparejada$

También se relatan los daños ocasionados

en las zonas agrícolas de la ciudad, especialmente

en las plantaciones de plataneras

situadas en las márgenes de los barrancos.

Vira de ids noticias que siempre se resalta

es cuando comienzan a discurrir las

aguas por el barranco del Guinigiiada y,

cuando succdcn, los danos que ocasiona tal

avenida. En alguna ocasión, este barranco

aumenta su caudal y 1'1s aguas invaden las

zonas colindantes próximas a su desembocadura,

o las fincas situadas en sus márgenes.

Sirva como ejemplo el temporal de

abril de 1901 donde el cronista relataba la

inundación sufrida en los barrios de Triana

y Vegueta por el desbordamiento del barranco:

"A las diez y medio de In noche los pitos de

los sumos daban la voz de nlnrina. Se pedía m -

xilio porque el Guinigitada se habín desbordado

junto al antiguo puente de Pnlastro inirndando

parte de las calles cercanas de los barrios

de Triana y Vegueta."

Asimismo, se describen los daños ocasionados

en las embarcaciones situadas en

el puerto. En este sentido, se relatan situaciones

en las que, debido al fuerte viento y

-1 . l . . ' ^ 1-. 1 .-...- ^ -..- _-A-...... ..

dl UICc<Jtl, 1UU UdICUS I U l l l ~ C I Sl U S dlllc<llL(S,V

terminan varando en alguna playa o colisionando

contra otras rmbarcaciones.

"El "Viera y Clavijo" rompió atnnrras cnzbistirndo

nl vapor carhoiirro dp nacionaiidrrd

Un siglo de temporales en la pren- de Gran Canaria - - - - - - - - 271

iizglesa "Arraiz" y causdndole algunas averías.

''

b) El interior de la isla

Cuando el cronista comienza a relatar

los daños en el interior de la Isla nos encontramos

que, en la mayoría de los casos,

los relatos son poco precisos. A ello se une

el retraso en la publicación del suceso que

oscila entre dos, tres o incluso más días una

vez ocurrido el desastre. Normalmente se

resalta la incomunicación existente entre la

ciudad y los pueblos del interior y de los

pueblos entre sí, especialmente debido a la

rotura de badenes y puentes. En algunos

casos se describe el paso de la tormenta a

travf S de la Isla, indicando los lugares donde

ésta adquirió mayores proporciones,

aunque esto no es lo frecuente. Como ejemplo

clarificador de esta situación de incnmunicación

destacamos el temporal de febrero

de 1912:

"De los pueblos del interior de la Isla trnrnzos

noticias incompletas, pero sabemos que los

daños materiales son enormes. Las carreteras

están intransitables, habiéndose suspendido el

tránsito rodado. Los teléfonos no funcionan; de

modo que casi puede decirse que se ha establecido

la incomirriicaciói~ entre el iii terior y Las

Palll2as." "

'Tal y como refieren Torres et alii (1986)

ilviiCias reciben la ssdc de!

periódico hacen referencia a la ciudad y a

su entorno más próximo. Sin embargo, las

p~iiiieiasii üiirias i-ii llegar yiüirdrn de :OS

municipios más cercanos a la capital, especialmente

de Santa Brígida, San Mateo,

Telde, Moya, Guía y Gákidr. Por lo Larilu,

durante estos cincuenta años la frase más

recurrida cuando se hace referencia a los

danos que ia tormenta ha causado en ei interior

de la Isla es la de " ... del intevior de los

pueblos nada se sabe todavía". Esto se debe a

que las comunicaciones con el interior son

todavía precarias, y a que los desperfectos

ocasionados por el temporal en las distintas

vías incrementan aún más esa incomunicación.

De la misma forma que, en la mayoría

de las situaciones analizadas, tan sólo se

hace referencia a los daños ocasionados en

la ciudad y a su entorno, encontramos

otras en las que la noticia tan sólo refiere

los daños ocasionados en algún municipio

del interior de la Isla, haciendo especial

hincapié en las víctimas prodiicidas por el

temporal, adquiriendo la noticia grandes

tintes sensacionalistas. En estos casos, se

recurre a los habitantes del municipio afrctado

para entrevistarles, los cuales van narrando

los daños causados por el temporal.

En estos casos, la crónica se hace extensa,

el relato de los daños minucioso, y las entidades

de población más afectadas son in-

A:,,A,, ,,, +,A, A,&,11,

UICCLUU., C V L L IVLIV U C L C L I I L .

"Esta maiZana Izenzos charlado algiín tiempo

con un hijo del citado p~leblo (Tejeda), don

llei-iberto Ilei-nátzdez Guerra, que conoce n In

pe$ección los mas apartados lugares del mismo."

"

3.1.2. Eventos catastróficos acaecidos entre

1900 y 1949

De las 20 situaciones que tuvieron cierta

trascendencia en la prensa en estos años,

hemos realizado una selección en función

de los daños ocasionados, del tiempo cn

que se estuvieron publicando en los periódicos

noticias referentes a cada evento

l-..-L- -A- A,. L..,.- A:--) -7 A,. 1-

[ . L u , u < a , L L , c , L L c ,lL'AC, uc L L C J UL'K?,, , UL &U

importancia que para la comunidad tuvo

cada una de ellas. E11 las tablas 1 y 2 apai.

ecei., i.ef:gados Cada suceso y. üi-I breve cümentario

de cada uno de ellos.

4. SEGUNDO PERIODO: 1950 A 1997

En estos 47 años se registraron en la

prensa insular un total de 44 situaciones

que ia prensa caiiiico de muy diversas maneras.

Entre los calificativos empleados

destacamos los de ''fuertes lliívias", "tronrba

de agua", "lluv~as torrenctales", "temporal",

"fuerte viento" y "oleaje".

Tal como se refleja en el figura 2, de las

44 situaciones analizadas, el 27,3% sucedieron

en el mes de diciembre, siguiendo

TABLA 1.

CONSULTUOS

Diario de Las

-DATOS CLI

Obsevatorio de

[.as Palmas '

Observatorio de

Las Palmas

- - -

Observatorio dc

Las Palmas

'2: kg. ?1 I\.IUNICIPIOS

,= 5 AFECTADOS e E. *

&g

( ( Vega de &m

DANOS EN IKFKAESTRCCTURAS

l

-<.

Agrieolas Urbanas Viarias

F

daños en las inundaciones en

plantaciones de Las Palmas de

z tomates del Sur Gran Canaria

de la Isla y las de debido al mar que

plataneras en el invadió las ireas

Norte (sobre todo litorales

rii Glldar, Guia y Importantes

Las Palmas de daños en el

1 .a caída de

árboles y los

dcsprendirnientos

provocaron la

inhabilitacihn de

alguiias vias dr

comunicación.

! Gran Canaria). 1 Puerto de l a LUZ 1

TABLA 2

JRAS ACTAS Viarias

r

f

e. AFECTADOS 3' g u .i 6.

1 S

Agrícolas Urbanas

Graves daños en

las plantaciones

ubicadas en los

márgenes de los

barrancos.

Especialniente

graves fueron en

Valsequillo,

Santa J.bcia y San

Bartolome.

Las Palrnas de

Gran Canaria

En Las Palmas dc

G.C., hubo daños

en la red viaria.

Intempción de la

camtcra dcl Sur

por obsmiccioces

en los puentes y

arrastie de

badmes

Destiuccióii de

,as casas y

establos cercanos

a la< márgenes de

los barrancas.

No hay datos 1 / santa Liicia de Tirajanr I I IVa lsequillo

San Bartolornf

- Las Palinas de

Gran Cínaria

Telde m- Graves daños

E" la ciudad. las

las fincas situadas

en la ciudad y en

afectadas fueron

los

las comprendidas

referidos sobre

entre el Paseo de

cn Tcldc,

Bravo MuriVo y

la plaza del

Valsequ'llo ingeniero León y

Agüiiiies. Ca:a~rilio

Prlcticarrientc la

totalidad de las

vías de la ciudad.

y las que enla7an

esta con el

interior dc la Isla

sufrieron grandes

dcsxrfectos.

Hoya del e Valsequillo

Garnmal 1 , 1 ~ m i o

'O Agaete

Teror

P

Hubo daños cn la

carretera de

Hubo importantes

daños ep distintos

pueblos de Tejeda 1 lnundacioncs de -

y Agarte (la por el de san Niculis.

relación de desbordamienlo La xlneteqruae

proprcta:ios que i conduce a Tcjcda

sufrieron daños " barrdricos'

1 estsha cnrraria por

Lomo Araete a la Aldea

A Ijonadcrn

Tero- 185,O

1 Ioya dcl

Gmronal 165.8 -

en sus fincas es l graldes

extcma) 1 dc~prcndiinieiiioa

en importancia los meses de noviembre y

enero.

FIGURA 2: Frecuencia mensual de sucesos

aciagos en la prensa grancanaria (1955-1997)

4.1. El relato periodístico

T .

L C ~ pienSd en csiüs Úiii~nub4 7 d í ~ u bs e

configura como un medio de comunicación

muy importante en la divulgación de noticias

referentes a situaciones meteorológicas

de diverso tipo, tanto si se hace referencia

a grandes temporales como a simples chubascos,

realizándose extensos reportajes

con magnífico soporte gráfico y ampliando,

cuando se hace necesario, las páginas

referidas a los danos que se producen. Adquiere

mayores tintes sensaciona~istas

(ocupan casi siempre la primera página),

los reportajes se hacen más extensos, y las

noticias se envían inmediatamente a la redacción

a través de los distintos corresponsales

repartidos por todos los municipios

de la Isla.

Si comparamos este periodo con el anterior,

en lo que a la descripción del temporal

se refiere, encontramos importantes

diferencias. De esta forma, aunque la noticia

se estructura siguiendo la misma línea:

hora cie coinienzo dei temporai y cuando

éste adquiere las mayores proporciones, en

este periodo se van eliminando progresivamente

valoraciones referentes a cómo vivía

la población el temporal. Se publican

cuantificaciones referidas a datos de los

elementos climáticos y, sobre todo a partir

de la década de los años sesenta, los datos

sinápticos facilitados por el Instituto Meteorológico

Territorial de Las palma^.^

En este periodo asistimos a una de las

mayores transformaciones que ha sufrido

la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria.

El crecimiento urbano de estos años, la

práctica desaparición de áreas cultivadas

en el interior de la ciudad, la creaci6n de

grandes barrios, todo ello unido a la creación

de nuevos servicios y al cambio operado

por la sociedad en estos años confiere,

al hecho aquí estudiado, una particular

dimensión. Por lo tanto, cada vez que se

sucede una situación meteorológica adversa

en la ciudad los darios se multiplican y

las áreas afectadas aumentan, reproduciéndese

fitG2~iGnef rPl;!-v.PntP crraxioc n>r;i o--.-- r---

población y sus actividades.

En cuanto a lo que a la descripción de

los daños se refiere, los titulares hacen especial

hincapié en: daños en vidas y bienes,

especialmente en el mobiliario urbano,

grandes 5reas inundadas, así como los dnños

ocasionados en las instalaciones portuarias.

A diferencia del periodo anterior,

en el que se llegaban a referir los daños

ocasionados en las propiedades privadas

con los nombres de los propietarios, en este

periodo se abandona esta particular forma

de redactar, y adquieren mayor relevancia

los daños ocasionados en los edifi-

-: -.<Ll: -..! l . . - >:>-.. -.- 1 - . . u v a yuui~cva~a,i culliu iua xtcruiuua cii I U ~

distintos barrios populares de la ciudad.

Esto se debe, entre otras razones, a que el

cspaciü cii ci que se desa~luiid id I I I J ~ U I

parte de las actividades ha aumentado cnnsiderablemente,

y a que los lazos sociales

se han disgregado como consecuencia del

considerable aumento demográfico (ya no

todos se conocen).

Asimismo, ios cambios socioeconóinicos

operados en este periodo propiciaron el

abandono de las actividades agrícolas en

favor de una terciarización de la economía,

multiplicándose las interrelaciones entre la

ciudad y el interior, convirtiéndose aquella

en centro funcional y aglutinador de servicios

a distintas escalas.

Como consecuencia de todo ello, observamos

que si bien los problemas que se suceaen

en ia ciudaci son prácticamente similares

a los del periodo anterior (inundaciones

de calles e inmuebles, obstrucciones

dei aicantariiiado, caíua de inuros, arrastres

desde los riscos y laderas de la "ciudad

alta" hacia las partes mas bajas de la ciudad,

etc.), sin embargo presentan sustanciales

diferencias. La principal es que ahora

los dafios afectan áreas más amplias (el

espacio construido es mayor), los problemas

se multiplican, y la población afectada

no sólo se reduce a la propia urbe, sino que

llegan a afectar a la poblacibn de otros municipios

que, inevitablemente, debe pasar

por la ciudad para poder realizar sus actividades,

pues ineludiblemente la red arterial

de comunicaciones entre el Norte y el

Sur pasa por la ciudad.

La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria

continúa con los graves problemas de

infraestructuras que se vienen arrastrando

históricamente, siendo especialmente significativas

las inundaciones que se producen

en distintas partes de la ciudad, la caída

de muros y los arrastres de materiales

procedentes de los riscos que enmarcan la

ciudad por su parte alta. Las peores situaciones

son las que se viven en las zonas

marginales de la ciudad, lugares donde se

reproducen situacioi-ies verdaderamente

dantescas y el mayor número de víctimas.

"De pronto, y en lo rnús allo del barrio de

San Juan, mis allrí del camino que conduce n In

batería de este nombre, en un lugar donde se

hacían Izumildísirrias uiviendas, corlstruidas a

base de cantos y ficrra de Znmora, se desplonzo'

un nzwo que desde Iiacía algiíri tiempo se había

apandado y estaba rajado por los extremos, que

eriliizalinrl con otros transversales, donde se tenía

proyectado edificar una casita. Una modesta

vivienda d~ madera donde estaban albergados

los ocho miembros de ln funlilin prupi~~turiu

de nqiiellos nzuros, f w alcanzada en el momento

en que estos se encontraban siunidos en siieno.

La masa de cemento y piedras y varios toneladas

de tierra qiie conteizín dicho miiro, se

desgajó sobre aqilella produciendo la catrístrofe,"

1"

Por viro iddo, iidy que Cle~idcdq~u e el

30% de las situaciones estudiadas hacen

alusión de forma exclusiva a los daríos que

ias iiuvias ocasionaron en ia ciudad de Las

Palmas de Gran Canaria. Un análisis de las

precipitaciones que se registraron en cada

uno de estos eventos vino a corroborar que

con precipitaciones del orden de los 15

l/m2, e incluso inferiores", los problemas

en la ciudad pueden llegar a considerarse

importantes, dadas las deficiencias en infraestructura~

a las que ya nos hemos referido.

Asimismo hay que señalar los graves

problemas que se producen en el viario de

la ciudad, los grandes atascos cada vez que

llueve, especialmente en las vías de acceso

a la capital tanto por el Sur como por el

Norte. Los desprendimientos han representado

un problema significativo, que sólo

ha sido parcialmente solventado en el

acceso por el Norte gracias a la variante del

Rincón.

Por otro ladv se refieren los daños ocasionados

en las instalaciones portuarias, especialmente

cuando se tiene que cerrar el

tráfico como consecuencia de algún fenómeno

meteorológico adverso, como puede

ser el fuerte viento o el oleaje.

Finalmente hay que señalar aqucllas

noticias que hacen referencia a los graves

problemas que ocasiona el fuerte oleaje en

el liloral, no sólo en la Avenida Marítima

sino también en las viviendas situadas a escasos

metros de la línea de costa como sucede

en El Confital o en San Cristobal.

b) El interior de la isla

Frente a la frasc que se recurría en el periodo

anterior "del interior de la isla rradi7 sirbemos

todavía", ahora las noticias procedentes

de los municipios de la Isla se van

reflejando en los distintos reportajes. Los

periodistas se embarcan en la aventura de

ir buscando informacibn por toda la orografía

insular gracias, entre otros factores,

a la mejora en las comunicaciones. Al mismo

tiempo, los corresponsales repartidos

por los municipios envían sus noticias a la

sede del periódico. Aparecen así grandes

reportajes (normalmente en primera página),

con un magnífico soporte gráfico en

los que aumenta el sensacionalismo aparejado

a toda situación crítica vivida por la

población.

Durante las primeras décadas de este

periodo el cronista comienza describiendo

cómo vivieron los agricultores el temporal

en el interior de la isla. A medida que el periodista

va avanzando en su recorrido se

va entrevistando con aquéllos y, cada uno

le va enseñando los destrozos que ocasionó

el temporal en su zona.

En cuanto a las noticias que se publican

hacen especial referencia a los aspectos siguientes:

los daños ocasionados en las vías

de comunicación, inundaciones y destrozos

(especialmente en la agricultura) y, sobre

todo a partir de la década de los 80, los daños

ocasionados en las infraestructuras

portuarias y turísticas del Sur de la Isla. Al

mismo tiempo se mencionan, cuando suceden,

los daños en el aeropuerto de Las Palmas.

Las noticias más ahiindantrs suelen hacer

referencia a los daños ocasionados en

las infraestructuras agrarias, especialmente

en los primerns treinta años dp te PPriodo.

Los daños causados por distintos

temporales fueron especialmente graves

para 12 agriru!ifira i c ! ~ ñE~n esto- rasolos

reportajes fueron realmente extensos, y

se hizo especial hincapié en la valoración

de los daños ocasionados. Cuando suceden

se relatan las fincas que se han visto sorprendidas

por las avenidas de los barrancas,

asi como !as imiidacioiies y !os destrozos

ocasionados en los pueblos, especialmente

en los edificios públicos.

Tdmbiéri se hice refereiicid d lüs cldiius

ocasionados en la red viaria insular. En este

sentido se mencionan las vías que se encuentran

cortadas al tráfico, normalmente

por desprendimientos, y las localidades

que quedan incomunicadas a consecuencia

de &as u otras circunstaricias, como por

ejemplo la crecida de los barrancos cuyas

aguas arrastran los badenes y/o los yuentes

de las carreteras. Como consecuencia de

esta incomunicación a veces sucede lo peor

que es la imposibilidad dc trasladar a algún

herido desde estos pueblos a los lugares

de asistencia.

4.2. Episodios de consecuencias catastróficas

en Gran Canaria entre 1950-1997

En las tablas 3,4 y 5 exponemos una selección

de los principales teinporalcs acaecidos

en este segundo periodo.

5. OTRAS CONSIDERACIONES

- trajo este epígrafe agrupamos aqueiia

otra información que se menciona en el relato

periodístico y que hace referencia a

distintos aspectos. tntre otros, nosotros señalamos

los siguientes:

a) Las peticiones

Otra de las cuestiones que, en ocasiones,

aborda el relato periodístico hace referencia

a las peticiones que realizan las autoridades

locales o insulares solicitando

ayudas para reparar los daños causados

por el Lemyoral. Estas ayudas se solicitan

al Estado y son remitidas, previo informe

de la autoridad gubernativa provincial, al

iiiiiiisit.riü cüriesyuiidiei-iie. Cii-va iüii-iü

ejemplo las peticiones realizadas tras el

temporal de enero de 1926 al Gobierno:

<, n r u r irr Deitgri~iún dei Guhic.1 rio y jcfüL~ti-ii

de Ohrns Públicas se ha frlqrnjiado al Gobirrno

dándose cileizta del estado en que kan quedado

las zlías y recfnn~nndoc riditos pnrn proceder

a los trnbnjos de lirupieza y reparncióii de

las mismas. Hnsta la fecha no ha sido posible

precisar lrr mportancia de los destrozos rii in

cuantía dc las obras a ejecutar, pero iiidzidablemrntr,

por los itzforrnes recogidos, la cifriz S&

bastante alzada." l2

b) Impacto psíquico en la población

Una de las características que preserila

la noticia periodística cuando relata un

TABLA 3.

CONSULTADOS

-

--

-D-AT OS CLI

E

m c. s.

Ayacata

Cuevas Blancas

Hoy del

Gamonal

Ingmio

Junta dc Obrds

del I'ueno

Basí de Hidros

(Las Palinas de

GC)

Hoya del

Ganional

Cuevds Biancds

Curva Grande

N 1

iy

2

Z Las Palma? de 5, = tiran Canaria S

2 e

3

L1

Agrícolas 1 Urbanas 1 Viarias

menciorian

referencias.

incomunicada^,

-

-ACT

'F 5

1 , % E

U-m

3 :

. UYi V0I

,a -

F

s.

O.

N S

N- \O

Vi -

-

mrp

5:

3

W e- -N W

Vei -

+

S

TABLA 4.

CONSULTADOS

El Eco de Canarias

1.0s peores daños

fuerm

ocosion~dosp or

el fucnc viento

reinante. Sin

embargo. hubo

prccipiiación

diar1.i superior a

100 inm en un

día.

Monlaia de

Tinna

Risco de Agaetc

Juntzi de Obras

dcl Pucno

Cueias Blancas

Ln Culdta de

Tejeda

Cuc\as dcl Pinar

Las Palmas de

Gran Cinaria

Tejeda

Mogin

San Ra~olomé

de Tirama

San Nirolas de

Tolentino

Aitcnaia

San M:teo

Agrícolas

Ciraves daños en

toda la comarca

Este y Sur de la

Isla. Lo mismo

ocurrió :n la

mayoría de los

municipios del

Norte.

Nnmercsas fincas

situadas en los

rnárgeni:~ dc lus

barrancos

quedaron

destniidas.

Los daños

agrarios en la

zona Norte

afecraron a

determiisdas

Cuicas. Loa prorrs

se localizan en la

zona de Tejeda

--

INFRAESTRIJC

Urbanas

Hubo daiio, en

los edificio;

publicos (agunos

de gran vahr

histórico) y

privados.

Inundacionrs en

Las Palmas de

Gran Canaiia:

graves daños en

el bariio de Las

Rehoyas

En Las Paliiias dc

G. C.

inundacion:~ y

desplome de

muros de

contencih

Daños en

disiintus cdiíicius

publicos de

iiiunicipios del

interior y

nirislicos dmtl Sur.

La caida de

muros de

contencih,

árboles y los

de~prrridiniierios

provocaron la

intempción de

numerosas \,ias de

-com-u nicación

La descripciór de

las vias de la

ciudad y del

interior que

sufrieron

dererioros es

enorme. - Innumcrablc

cantidad de

pueblos del

interior

inconiunicadoj.

La dcsciipzióri de

vias dañadas es

enornic. Ilubo

importantes dzfios

cn cl Pucrto di: La

I.uz, Parito

Blanco y en

Pucilo Rico. -

Temisas 187,O

San Roqoe 174,2

3 W

C.

mh

h7,

2

2 m

2

"

a

5

8

Lomo Polvo 162.2

Escalentas 143,O

PEMODICOS

CONSULTADOS

La Provincia

Canarias 7

La Provincia

Canarias 7

Junta de Obras

del Puedo

k?

2

Presa de Hornos 242,6

Lomo Morales 219,6

Agua Latente 256,Z

Las Palmas de

Gran Canaria

Santa Maria de

Guía

Gáldar a SanMateo 2 Mogán

San Bartolcmé

de Tiajana

Valleseco

Tejeda

Las Palmas de

Gran Canaria

Mogán

6 Tejeda

5 La Aldea di:

;; San Nicola!;

E Santa Luciz de

Tirajana

San Banolam.!

de Tirajana

Agricoliis Urbanas

- - Inundaciones y

caída de muros de

contención en

distintos bamos

No hay de la ciudad.

~efcrencias. Los Destacamos Sari

mayores da6os se Cristóbal y

produjeron tn las Triana. Gran

infraestnchiras cantidad de

urbanas (sotue edificios piihlic,x

todo de la erpital) inundados o eoii

así como en las serios daños

distintas via:; del (sobre todo los

interior de 121 Isla. centros

escolares).

También hubo

inundaciones en

Ciáldar Guía. --i--

Se mencionm

ImPortantes

.&Idea de San

Yicolás.

graves fueron en

Mogán.

URAS

Viarias

Hubo importantes

daños en las vias

de la ciudad así

como en las del

interior de la Isla

(carreteras de San

Bartolomé de

Tiiajana, Santa

Lucía, Mogán,

Tejeda,

Valleseco, etc.)

Cierre de Pueito

de La Luz, el cual

sufrió importantes

daños.

A parte de los

daños en el viario

de la ciudad hubo

importantes

desprendimientos

en distintas

carreteras del

centro y Sur de la

Isla motivo por el

cual muchos

pueblos quedaran

incomunicados.

280 Pablo Mnyer Sunuez

temporal de consecuencias aciagas para la

población es la de hacer referencia a temporales

pasados. Tanto es así que, cuando

se produce un temporal de grandes proporciones,

el cronista o la persona a la que

se entrevista rememora un temporal pasado

y que se ha vivido de forma más o menos

similar. Como ejemplo tenemos e! temporal

de noviembre de 1946, donde se entrevista

a un paisano de Agaete quien

recuerda el temporal ocurrido en aquel

municipio el 18 de febrero de 1896:

"Coristc que yo no me pasi el temporal esta

vez, coino hacc 50 arios, en que tuvo lugar

irno tremendo, q l c~nu só daños de considernción.

Fue algo enorme, que cada vez que recuerdo

parece como si atín estmiera viziiéndolo.

No puede V. imaginarse aquello. El agua caía

sobre los tejados como si fueran piedras de

diez kilogrntnos o nzRs y las tiarranqueras eran

importanfes. No puedo describir lo que el barrnnco

pnrecía. ¡Algo fantástico, de zierdndero

espanto! Arrastrabn piedras de extraordinario

oolumen, como si fzleraiz naranjas. " l3

De esta forma, gracias a lo que podríamos

denominar "impacto psíqilico y sorid

duradero muy importante" nos adentramos

en el tiempo y encontramos que, tras una

catástrofe de cnnsec~iericiasg raves para la

población, aparece algún individuo recordando

cuándo fue el año en que se reprodi.+

iina ritlx+ribn similar, pi'diendo averiguar,

de esta forma, otros temporales de

los que no se conservan fuentes escritas.

6. CONCLUSIONES

La prensa en Gran Canaria se nos presenta

como una fuente de gran valor sobre

todo si tenemos en cuenta la minuciosidad

con la que se trata cada evento meteoroló-

-;-- - A "- T - - L : A - --- :L- ---l.- ~ I C Uau VCLSU. laululcli I IUS ~ C L ~ I L I uLi aCl L L c -

ner una cierta continuidad temática, gracias

a la publicación de numerosos periódicos

que y uederi ser- coritrdstadus en todo

el periodo estudiado. Asimismo, tanto la

descripción detallada de cada evento como

la realización de entrevistas a los afectados

permite tener una visión global de los daños

en el conjunto de la Isla, sobre todo a

partir de los años 50.

lJodemos concluir, a tenor de lo analizado

en este siglo, que tres son las situaciones

meteorológicas que han causado importantes

daños en vidas y bienes en Gran

Canaria:

a) Episodios de lluvias torrenciales

que han provocado graves inundaciones y

avenidas en los distintos barrancos afectando

a: poblaciones (especialmente Las

Palmas de Gran Canaria), infraestructuras

agrícolas situadas en los fondos de los barrancos,

grandes desprendimientos de tierra

que inhabilitan vías de comunicación y,

ocasionalmente, movimientos en masa como

consecuencia de periodos de lluvia intensa

continuados.

b) Episodios o eventos de viento a

gran velocidad que han causado importantes

daños, sobre todo en el subsector

agrícola, amen de daños en edificios públicos

emblemáticos.

C) Episodios de fuerte marejada que

han invadido literalmente áreas litorales,

causando importantes daños en las infraestructuras

portuarias, residenciales y turísticas

en los distintos municipios costeros

de la isla.

Por otro lado, la prensa representa una

fuente que, ante la imposibilidad con que

nos encontramos miichar veces de poder

contrastar con otro tipo de fuentes los daños

ocasionados en cada evento (sobre torln

en !a primerz mitad de sig!o), ph!ica

valoraciones realizadas desde el Gobierno

Civil, los "despachos telegráficos" de las

autoridades locales, insulares y provinciales,

así como las actas del Ayuntamiento de

Las Palmas de Gran Canaria y las del Ca-

L: l . l - 7 l - . . 2. r-. .-.. 0 -A-.:.-

LJLLUU L I L X U ~ L uc ulal i L ~ iIdl id.

Asimismo hay que destacar que, a medida

que cambia la ocupación del suelo, la

inforrndcit'm referente d los dafios ocdsionados

en cada evento va variando. Cuando

analizamos un problema y cómo éste se

reproduce a lo largo del tiempo (ante condiciones

climáticas similares), encontramos

Un siglo de temporales en la prensa de Gran Canaria 281

que los daños afectan a áreas nuevas. Los

problemas varían en función de los sectores

a los que afecta apareciendo, sobre todo

en el segundo periodo de nuestro trabajo,

importantes daños en el subsector turístico

(problema que en el primer periodo

afectaba de forma menos importante y

muy localizada a las infraestructuras turísticas

ubicadas en la capital). Por otro lado,

los daños en el sector primario son cuantitativamente

menores, aunque cualitativamente

más importantes, que los ocurridos

a principios de siglo.

Como contrapunto, la prensa presenta

una serie de limitaciones, entre las que destacan

las siguientes: la imposibilidad de

cuantificar los daños, pues ello requiere valoraciones

a posteriori que tan sólo pueden

dar los organismos competentes. En este

sentido, en algunos casos la prensa publica,

transcurrido un periodo de tiempo, las

valoraciones que sobre u11 determinado

evento han realizado las autoridades gubernativas.

Asimismo, el excesivo sensacionalismo

con el que se trata este tipo de información

conduce a determinadas ciiantificaciones

de los elementos climáticos carentes de toda

objetividad, dando valores que no son

contrastados y que se deben a estimaciones

de los mismos corrcsponcales o dc los habitantes

de los lugares donde ha sucedido

el fenómeno. Todo ello obliga a contrastar

esas informaciones con otras fuentes.

282 Pablo Má1li.r Sirár~v

NOTAS

GR~MAYL GTE LARERMT,. (1992): Geografía del

Risc a Mallorca. Les inundacions. Institut

d'Estudis Baleárics.

Extraído del Diario de Las Palmas 13 de abril

de 1901. Pág. 2.

Extraído del Diario de Las Palmas 13 de abril

de 1901. Pág. 2.

Extraído de La Defensa 9 de febrero de 1912.

Pág. 2.

Extraído de La Defensa '3 de febrero de 1'312.

Pág. 7.

Extraído de La Provincia 3 de diciembre de

ni- 7

I ,TU. l aF>. J.

El Observalorio de Las Palmas estaba ubicado

en el Colegio de San Agiistín, siendo uno

de los más antiguos de la Isla (los registros

más antiguos que se conocen son los del Seminario

de Las Palmas de Gran Canaria que

abarcan el período 1869-1873). Comenzó a

funcionar en el año 1882, causando baja en

1920. Hasta 1928, en que se instala la estación

de la Junta de Obras del Puerto, no tendremos

datos de elementos climáticos en Las

Palmas de Gran Canaria (si exceptuamos los

datos que aparecen en los Boletines Meteoro-

Lo rcd insular de estaciones pluviométricas

del actual Servicio Hidráulico de Las Palmas

(Consejería de Obras Públicas, Vivienda y

Aguas) comen70 a instalarse en 1924 por la

cimpañía que tenía entonces a su cargo la explotación

del servicio de abastecimiento de la

ciuflaci. En iYSil, se iievci a cabo ia instaiacion

de un importante número de plutr"i ometros

cuyos registros podían considerarse representativos

de la precipitación insular. En 1970

se realizó una importante campaña de rcvisión

y control. En la actualidad, la red pluviomGtrica

consta de más de 245 estaciones.

9 A medida que los avances permiten conocer

de forma científica y precisa el estado de la

atmósfera y su posible evolución. comienzan

a aparecer las predicciones meteorológicas.

En un primer momento estos mapas se publican

de forma divulgativa, intentando familiarizar

a los lectores con aquellos. Con el

transcurrir de los años aparecen secciones dedicadas

exclusivamente a las predicciones

meteorológicas con distintos titulares, siendo

el más recurrido "El tiempo".

10 Extraído del Diario de Las Palmas 4 de diciembre

de 1957. Pág. 6.

11 No debemos olvidar la gran variabilidad espacial

de las precipitaciones. Se da el caso de

-Y..,'C.,4"Y-:'-"*",:.-'".."-'"" A-1 ,.,.a,... a,. m ...:I:....,.L"A" "C. V.""' U' '""U ""'""""

en un pluviómetro ubicado en la misma ciudad

de Las Palmas de Gran Canaria y, a escasos

kilómetros, en otros registros, las precipitaciones

son inapreciables. Asimismo no

debemos olvidar la intensidad con las que

caen estas precipitaciones pues, aunque en

principio puedan parecer escasas, suelen caer

en escasos minutos.

12 Extraído de La Provincia 19 de enero de

1926. Pág. última.

13 Extraído de La Provincia el 5 de diciembre

.. de 1946. Pág. última. l i 'V'Y.AA. (i96ój. Ei yr~pei Lic irc yrerrsii cti r i eat~

idiod e Ins catnstro)~ nntiirnks rii Gran Cnnririn

(lslns Cntznrias, Espriñd. Ediciones del Cabildo

Insular de Gran Canaria.